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cion del Departamento de Deux-Sèvres espidió una órden proscribiendo á los sacerdotes, y á causa de ello se levantaron ocho mil hombres del Distrito de Châtillon para oponerse á la ejecucion de tal medida; obligaron á un gentilhombre á que les mandase militarmente, y despues de haber tomado á Châtillon, marcharon sobre Bressuire. Como esta ciudad se resistió durante algunos dias, las guardias nacionales de las poblaciones inmediatas, tuvieron tiempo de reunirse y armarse; los campesinos abandonaron un campo de batalla cubierto de muertos y se dispersaron en los bosques.

El 10 de Marzo de 1793, tres mil jóvenes de la Vendée estaban reunidos en el burgo de San Florencio para el sorteo de la conscripcion. Decididos á batirse por su religion y su pais, mas bien que en contra de una y otro, reclamaron en alta voz la exencion del servicio militar, y se les contestó por medio de un cañon cargado de metralla. En vez de huir, se eçharon sobre la batería, la volvieron contra los guardias nacionales, se hicieron dueños del burgo, y por la tarde, una alegre luminaria, prendida con los registros del censo militar, anunciaba a las poblaciones del Oeste el primer triunfo de la Vendée sobre la república francesa.

Al siguiente dia, 11 de Marzo, se tocaba á rebato en todas las parroquias del Alta-Vendée, llamando al pueblo á las armas. Veintisiete individuos, al atravesar la aldea de Pin-en-Mauges, escogieron por gefe á un pobre mercader de lana, llamado Santiago Chathelineau, y conocido por el Santo de Anjou á causa de su piedad. Así comenzó el grande ejército del Oeste, reclutado con algunos nuevos voluntarios, y que por primer estandarte escogió la cruz, signo de la redencion del mundo. Pocos dias despues, cuando con ayuda de la nobleza del pais, los vendeanos estendieron y regularizaron la campaña, enarbolaron la bandera blanca.

Los campesinos de la Vendée iban al combate como los primeros cristianos al martirio, y los guardias nacionales, indisciplinados y desconcertados, apenas osaban oponerles resistencia. Una circunstancia les permitió respirar por un momento. El 27 de Marzo de 1793, miércoles santo, los insurrectos católicos, de comun acuerdo, formaron la resolucion de volver á sus parroquias respectivas y prepararse en ellas á la Pascua de Resurreccion: vióseles entonces separarse en buen órden, desamparar los puntos que les habia sometido la victoria, y volver á las aldeas para acudir presurosos á los confesonarios y á aquel banquete en que el Dios de los ejércitos es á la vez el pontífice y la víctima. Todo este tiempo fué de esperas concedidas á los republicanos y á la convencion. Las autoridades reconcentraron tropas, dictaron disposiciones defensivas y enviaron destacamentos á los puntos mas amenazados. Con todo, el cumplimiento de los deberes que impone la Iglesia, añadió nueva energía á la fé y á la decision de los vendeanos. Tan luego como estos nuevos Macabeos volvieron á empuñar las armas, publicaron una especie de declaracion ó manifiesto en el cual, despues de haber protestado contra el azote de la milicia, se espresaban así: "Devolved á nuestros votos ardentísimos nuestros antiguos pastores, aquellos que fueron siempre nuestros benefactores y amigos,

que comparten nuestros males y trabajos y nos ayudan á soportarlos por medio de instrucciones piadosas y de su propio ejemplo. Devolvednos con ellos el libre ejercicio de una religion que fué la de nuestros padres, y por cuyo sostén sabrémos verter hasta la última gota de nuestra sangre. Tales son nuestras principales exigencias. A ellas añadimos nuestro voto por el restablecimiento del trono.... Estamos todos unidos en favor de una misma causa; no reconocemos por gefe sino el amor de nuestra sagrada religion, de la justicia y de una libertad bien entendida.... Concedednos lo que pedimos, y desde luego aceptamos proposiciones de paz y de fraternidad."

[Concluirá.]

NOTICIAS.

SANTOS Y FESTIVIDADES RELIGIOSAS DE LA SEMANA.

AGOSTO.

JUEVES 27.-San Cesareo obispo y el Dardo de Santa Teresa. VIERNES 28.-San Agustin obispo y doctor de la Iglesia, y San Hermes mártir.

SABADO 29.-La degollacion de San Juan Bautista y Santa Sabina mártir. DOMINGO 30.-(Quinto de mes y décimotercero de Pentecostés.) Santa Rosa de Lima y San Fiacro confesor.

LUNES 31-San Ramon Nonnato cardenal. Dedicacion de la Santa Iglesia Catedral.

SETIEMBRE.

MARTES 10-Nuestra Señora de los Remedios, San Gil abad y los Santos profetas Josué, Gedeon y Ana.

MIERCOLES 2.-San Esteban rey de Hungría, y San Diómedes mártir.

Hoy jueves, octava de San Bernardo y funcion en su iglesia. Indulgencia en las iglesias de carmelitas. Vísperas y maitines solemnes en San Agustin. Mañana viernes, funcion solemne de este santo en su iglesia con asistencia de los reverendos prelados y sagradas comunidades, é indulgencia plenaria por ocho dias, estensiva á todas las demas iglesias de la Orden.

El sábado, procesion de Santa Rosa, de Santo Domingo á Catedral y maitines en esta iglesia. Nocturno en el Señor de Santa Teresa.

El domingo, funcion solemne en Catedral á Santa Rosa, como patrona de las Américas, con procesion que sale de esta iglesia á la de Santo Domingo é indulgencia plenaria en las iglesias de este santo. Funcion solemne y bendicion papal en San Agustin. Este dia comienza la novena de Nuestra Señora de Loreto, siendo en su iglesia, en la de Regina y en la de Balvanera, con su Majestad manifiesto y pláticas. Procesion y sermon en Catedral y sermon en la Colegiata. Jubileo circular en Santa Teresa la Nueva. En el ejercicio que celebra la cofradía del Corazon Inmaculado de María, en el

Colegio de Niñas, despues de la misa de nueve, predicará el M. R. P. Fr. J. Gonzalez.

El lunes, funcion muy solemne en Catedral y en la Merced, con absolucion en esta iglesia y en el Sagrario.

El martes, funcion que hace el venerable cabildo á Nuestra Señora de los Remedios en su santuario.

El miércoles, depósito solemne en Santa Teresa la Nueva.

REVISTA DEL ESTERIOR.

ESTADOS-UNIDOS.

La prensa católica de la República vecina se ha ocupado recientemente de la última pastoral del Illmo. Sr. Verea, obispo de Monterey, que segun dijimos hace pocos dias, fué impresa en el Estado de Tejas.

El Propagateur catholique y el Catholique Mirror han consagrado estensos y bien escritos artículos al asunto en cuestion. Se espantan de que los liberales de México nieguen á nuestros obispos el derecho de manifestar su opinion acerca del código constitutivo, á fin de que tal opinion sirva de guía á los fieles, y aseguran que los espresados pastores no solo han hecho uso de un derecho, comun á todo ciudadano bajo un régimen liberal, sino cumplido con un deber, puesto que la citada constitucion evidentemente ataca los derechos de la Iglesia.

Veamos cómo se espresa el Mirror mas adelante.

"En la historia de esta pastoral hay otro incidente, demasiado característico para que omitamos referirlo. El Illmo. obispo, ya sea porque ningun impresor del pais quisiera prestar sus tipos para la publicacion de la pastoral, ó porque, mediante el generoso espíritu de caridad que anima á las almas verdaderamente cristianas, no quisiera hacer á persona alguna partícipe de sus propios peligros, se vió obligado á enviar su manuscrito á Tejas, para que fuese impreso en San Antonio de Béjar. A esto se reduce la libertad de la palabra y de la prensa bajo el régimen liberal de México. ¡Un sacerdote ó un obispo católicos no pueden dirigir una carta pastoral á su grey, á menos que no la envien á imprimir al estranjero, en paises no católicos."

El Mirror no sabia acaso que la pastoral á que alude, no obstante haber sido impresa en Tejas, fué mandada recoger por el gobierno del Estado de Nuevo Leon.

¡Con razon nuestros vecinos se hacen cruces sin poder comprender nuestro liberalismo!

ROMA.

Un incidente muy raro en los anales de la diplomacia pontificia, ha venido á atravesarse entre las relaciones asaz tibias de la Cerdeña con la Santa Sede. La similitud de circunstancias en que nos hallamos, hará que sean vistas con interes las siguientes líneas.

Sabido es que el gobierno sardo, despues de haber desquiciado en su reino cuantas instituciones fundó la Iglesia y sirven de base á la sociedad, trata de reanudar con Roma sus antiguas relaciones, y ha enviado allá recientemente un ministro que se llama el caballero Boncompagni, y que viene á ser, como si dijéramos el Montes del espresado gobierno. Inútil es decir que este quiere reanudar relaciones sin deshacer agravios, ó en otras palabras, que la Santa Sede reconozca y sancione cuantos golpes se han consumado contra la Iglesia en aquella parte de la Italia. Para quien conozca la firmeza de los sucesores de San Pedro en recorrer una senda de que jamas deben apartarse, no deja de ser escabrosa y difícil la mision del caballero Boncompagni, á semejanza de algunas otras misiones y embajadas. Pero, dando ya de mano á todo comentario, traduzcamos lo que publicó á fines de Junio último el Cattolico de Génova y ha reproducido el Univers de Paris:

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"Cuando el enviado sardo, caballero Boncompagni, fué introducido cerca del Santo Padre, hallábanse presentes un cardenal-arzobispo y otros dos prelados; quisieron retirarse, pero S. S. les dijo que se quedaran. Al entrar á la sala de audiencia, el Sr. Boncompagni tomó la palabra, diciendo que iba enviado por su rey y por su gobierno á fin de presentar sus homenajes á S. S. Escuchóle el Papa con el aire de angelical dulzura que le caracteriza; pero el Sr. Boncompagni, continuó diciendo: "Santísimo Padre, mi gobierno se hace un deber, y considera como una gloria suya el proteger la religion y la Iglesia.... Aun iba á continuar en este tono cuando le interrumpió el Papa, y con aquel acento dulce, pero severo, propio de la autoridad pontifical, le dijo: "Cesad, os lo ruego, y no hableis mas de estas cosas, porque, con mucho sentimiento, me veria obligado á contradeciros." El Sr. Boncompagni, enteramente desconcertado, palideció y se quedó confuso. A fin de darle tiempo á que se repusiera, el Santo Padre dirigió entonces la palabra al cardenal-arzobispo, y en seguida, volviéndose hácia el enviado sardo, le despidió graciosamente."

Se ve, pues, que los gobiernos liberales están resueltos á proteger á todo trance á la Iglesia. No queremos hablar por hoy del género de tal proteccion, y sí solamente dejar consignado que la Iglesia está resuelta á no admitirla.

BÉLGICA.

En aquel pais ha entrado la reforma, lo mismo que en Cerdeña y en otras partes, distinguiéndose por su odio á las instituciones católicas. "¡Abajo los sacerdotes y los conventos!" es el grito del liberalismo belga. Algunas bandas de los mas entusiastas reformistas cayeron sobre la casa religiosa de los Hermanos de Jemmapes, y se preparaban nuevos ataques á las comunidades de ambos sexos. Circulan, ademas, multitud de canciones, escitando al pueblo al asesinato de los sacerdotes. "A tales abyecciones-dice un periódico de Paris-se ha descendido hoy en Bélgica. La libertad de la prensa se emplea en impartir semejante enseñanza al pueblo."

Otro periódico de Gante, el Bien público, dió á luz el "Acto de fé del liberal puro." Dos de los artículos de este Acto son los siguientes: "Creo que las logias deben ser libres, las tabernas libres, los clubs libres, los teatros libres, los templos protestantes libres, los lupanares libres con patentes; todas las asociaciones libres; libertad para la mentira y las blasfemias de la prensa.... libertad para insultar y calumniar á los sacerdotes; para escarnecer la religion venerada por la inmensa mayoría de los belgas. Pero las asociaciones religiosas, las obras religiosas, nada de libertad para ellas; es preciso librar de ellas al pais.... La logia lo ha dicho; la prensa lo ha repetido; preciso es creerlo. "Creo que corresponde á la logia hacerlo todo de nuevo á imágen suya y reformar el pais. La logia es una fábrica á la altura del greso moderno. Entonces tendrémos una religion masónica; la que viene de Dios nada vale; necesitamos una que venga de la logia y que permita casi todo lo que Dios prohibe: religion del porvenir que no obligue al presente. Entretanto, cada cual puede fabricarse una á su modo, que no exija ni oraciones, ni buenas obras, ni virtudes, ni el triunfo sobre las pasiones."

pro

La Independencia belga y el Diario de Gante pusieron el grito en el cielo al leer las anteriores líneas, porque una de las manías de los liberales es la de querer pasar por hombres religiosos y morigerados. Con todo, el Bien público les prueba que no son otras sus aspiraciones, y en demostracion de ello cita el proyecto de una nueva edicion de las "Obras de Marnix de Sainte Aldegonde," terrible iconoclasta del siglo XIX, y cuyo proyecto está patrocinado por los principales gefes de la revolucion democrática, refugiados en Bruselas.

Uno de los citados demócratas, llamado Quinet, ha escrito el prólogo de las obras de Marnix, y espresa que en ellas "se trata, no de refutar el catolicismo, sino de estirparlo; no solo de estirparlo, sino de deshonrarlo; no solo de deshonrarlo, sino de ahogarlo en el cieno."

"Palabras espantosas-dice el Bien público-que encierran todo el secreto de la lucha á que hoy asistimos!" Preciso es que el catolicismo caiga, “dice M. Quinet. Estas palabras inscritas en la bandera del partido anticristiano, han venido á ser el grito de guerra de todas las fracciones del liberalismo en Bélgica. En adelante, quedan rasgados todos los velos. Ya no engañarán á persona alguna las hipócritas protestas de la Independencia y del Diario de Gante. Cuando estos periódicos vengan hablándonos todavía de su respeto á nuestra santa religion, les remitirémos á la publicacion nacional de las obras de Marnix, hecha bajo el patrocinio de los hombres mas influentes del partido liberal, con aplauso de los periódicos de todos los matices liberales." ¡Cualquiera diria que los mexicanos somos belgas!

México, Agosto 26 de 1857.

J. M. ROA BARCENA.

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