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commodiori tempore, pro more provinciæ, non prætermittat Synodum in provincia sua cogere: quo Epis copi omnes, et alii, qui de jure, vel consuetudine interesse debent, exceptis iis, quibus cum imminenti periculo transfretandum

en lo sucesivo de tres en tres años por lo menos, despues de la octava de la Pasqua de Resurreccion, ó en otro tiempo mas cómodo, segun costumbre de la provincia: al qual estén absolutamente obligados á concurrir todos los Obispos y demas personas que por derecho, ó por costumbre, deben asisesset, convenire omninò tetir, á excepcion de los que tengan neantur. Nec Episcopi comprovinciales prætextu cujus- que pasar el mar con inminente libet consuetudinis ad Me- peligro. Ni en adelante se precisatropolitanam ecclesiam in rá á los Obispos de una misma proposterum accedere inviti vincia á comparecer contra su yocompellantur. Itidem Epis- luntad, baxo el pretexto de qualcopi, qui nulli Archiepis- quier costumbre que sea, en la copo subjiciuntur, aliquem iglesia Metropolitana. Ademas de vicinum Metropolitanum se- esto, los Obispos que no están sumel eligant; in cujus sy-jetos á Arzobispo alguno, elijan nodo provinciali cum aliis interesse debeant ; et quæ ibi ordinata fuerint, observent, ac observari faciant. In reliquis omnibus eorum exemptio, et privilegia salva,atqueintegra maneant (1). Synodi quoque diœcesanæ quotannis celebrentur: ad quas exempti etiam omnes, qui aliàs, cessante exemptione, interesse deberent, nec capitulis generalibus subduntur, accedere teneantur: ratione tamen parochialium, aut aliarum sæcularium ec

clesiarum, etiam annexarum, debeant ii, qui illarum curam gerunt, quicumque illi sint, synodo inter

es

(1)

c.6.Tolet.XI.

Sess. 8.

por una vez algun Metropolitano
vecino, á cuyo concilio provin-
cial deban asistir con los demas,
y observen y hagan observar las
cosas que en él se ordenaren. En
todo lo demas queden salvas y en
su integridad sus esenciones y pri- Aur.V.c.18.
vilegios. Celebrense tambien to- Tarracon. 1.
dos los años sínodos diocesanas, c.s.et Basil
y deban asistir tambien á ellas to-
dos los esentos, que deberian con-
currir en caso de cesar sus esen-
ciones, y no están sujetos á capí-
tulos generales. Y con todo, por
razon de las parroquias, y otras
iglesias seculares, aunque sean
anexas, deban asistir á la sínodo
los que tienen el gobierno de ellas,
sean los que fueren. Y si tanto los

Me

(1)

Tolet.V.c..

Metropolitanos, como los Obis-
pos, y demas arriba mencionados,
fuesen negligentes en la observan-
cia de estas disposiciones, incur-
ran en las penas establecidas
por
los sagrados cánones.
Cap. III. Como han de hacer los
Obispos la visita.

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i los Patriarcas, Primados, Me

pu

tropolitanos y Obispos no diesen visitar por sí mismos,ó por su Vicario general, ó Visitador en caso de estar legítimamente impedidos, todos los años toda su propia diócesis por su grande extension; no dexen á lo menos de visitar la mayor parte, de suerte que se complete toda la visita por sí, ό por sus Visitadores en dos años. Mas no visiten los Metropolitanos, aun despues de haber recorrido enteramente su propia dióce sis,las iglesias catedrales,ni las diócesis de sus comprovinciales,á no haber tomado el concilio provincial conocimiento de la causa, y dado su aprobacion. Los Arcedíanos, Deanes y otros inferiores deban en adelante hacer por sí mismos la visita llevando un notario, con consentimiento del Obispo, y solo en aquellas iglesias en que hasta ahora han tenido legítima costumbre de hacerla. Igualmente los Visitadores que depute el Cabildo, donde este goce del derecho de visita, han de tener primero la aprobacion del Obispo; pero

no

esse (1), Quòd si in his tàm Metropolitani, quàm Episcapi, et alii suprascripti negligentes fuerint; pœnas sa

cris canonibus sancitas, in

currant.

Cap.III. Qua ratione visitatio ab Episcopis facienda.

Patriarcha, Primates, Me

tropolitani, et Episcopi ipsos; aut, si legitimè impropriam diœcesim per se neralem Vicarium, aut Vipediti fuerint, per suum gesitatorem, si quotannis totam, propter ejus latitudinem, visitare non poterunt, saltem majorem ejus partem, ita tamen, ut tota biennio per se, vel Visitatores suos compleatur, visitare non prætermittant. A Metropo litanis verò, etiam post plenè visitatam propriam diœcesim, non visitentur cathedrales ecclesiæ, neque diaceses suorum comprovincialium, nisi causa cognita, et probata in concilio provin ciali.Archidiaconi autem,Deecclesiis, ubi hactenus visicani, et alii inferiores in iis tationem exercere legitimè consueverunt, debeant quidem, assumpto notario, de consensu Episcopi deinceps visitare. Visitatores etiam à per se ipsos tantùm ibidem Capitulo deputandi, ubi Ca pitulum jus visitandi habet,

priùs

priùs ab Episcopo approbentur: sed non ideò Episcopus, vel, co impedito, ejus Visitator easdem ecclesias seorsùm ab his visitare prohibeatur: cui ipsi Archidiaconi, vel alii inferiores, vi

sitationis factæ infra mensem rationem reddere, et depositiones testium, ac integra acta ei exhibere teneantur : non obstantibus quacumque consuetudine, etiam imme

morabili, atque exemptionibus, et privilegiis quibuscumque. Visitationum autem omnium istarum præcipuus sit scopus, sanam, orthodoxamque doctrinam,expulsis hæresibus, inducere; bonos mores tueri, pravos corrigere; populum cohortationibus, et admonitionibus ad religionem, pacem, innocentiamque accendere; cætera, prout locus, tempus, et occasio feret, ex visitantium prudentia ad fidefium fructum constituere. Quæ ut faciliùs, feliciùsque succedant; monentur præ dicti omnes, et singuli, ad quos visitatio spectat, ut paterna caritate, christianoque zelo omnes amplectantur : ideòque modesto contenti èquitatu, famulatuque, studeant quamcelerrimè, debita tamen cum diligentia, visitationem ipsam absolvere.

In

no por esto el Obispo, ó impedido este, su Visitador, quedarán excluidos de visitar por sí solos las mismas iglesias; y los mismos Arcedianos, ú otros inferiores estén obligados á darle cuenta de la visita que hayan hecho, dentro de ciones de los testigos, y todo lo un mes, y presentarle las deposiactuado ; sin que obsten en contrario costumbre alguna, aunque sea inmemorial, esenciones, ni privilegios, qualesquiera que sean. El objeto principal de todas estas visitas ha de ser introducir la doctrina sana y católica, y expeler las heregías; promover las buenas cos tumbres y corregir las malas; inflamar al pueblo con exhortaciones y consejos á la religion, paz é inocencia, y arreglar todas las demas cosas en utilidad de los fieles, segun la prudencia de los Visitadores, y como proporcionen el lugar, el tiempo y las circunstancias. Y para que esto se logre mas cómoda y felizmente amonesta el santo Concilio á todos y cada uno de los mencionados, á quienes toca la visita, que ca la visita, que traten y abrazen á todos con amor de padres y zelo cristiano; y contentándose por lo mismo con un moderado equipage y servidumbre; procuren acabar quanto mas presto puedan, aunque con el esmero debido, la visita. Guardense entretanto de ser gravosos y molestos á ninguna

per

Interimque caveant, ne inutilibus sumptibus cuiquam graves, onerosive sint ; neve ipsi, aut quisquam suorum quidquam procurationis causa pro visitatione excep

persona por sus gastos inútiles; ni reciban, así como ninguno de los suyos, cosa alguna con el pretexto de procuracion por la visita, aunque sea de los testamentos des. tinados á usos piadosos, á cion de lo que se debe de derecho de legados pios; ni reciban baxo qualquiera otro nombre dinero, ni otro don qualquiera que sea, y de qualquier modo que se les ofrezca: sin que obste contra esto costumbre alguna, aunque sea inmemorial; á excepcion no obstante de los víveres, que se le han de subministrar con frugalidad y moderacion para sí, y los suyos, y solo con proporcion á la necesidad del tiempo, y no mas. Quede no obstante á la eleccion de los que son visitados, si quieren mas bien. pagar lo que por costumbre antigua pagaban en determinada cantidad de dinero, ó subministrar los víveres mencionados; quedando ademas salvo el derecho de las convenciones antiguas hechas con los monasterios, ú otros lugares piadosos, ó iglesias no parroquiales, que ha de subsistir en su vigor. Mas en los lugares ó provincias donde hay costumbre de que no reciban los Visitadores víveres, dinero, ni otra cosa alguna, sino que todo lo hagan de gracia; observese lo mismo en ellos. Y si alguno,lo que Dios no permita, presumiere tomar algo mas en algu

no

etiam

testamentorum ad pios usus præter id, quod ex relictis piis jure debetur, aut alio quovis nomine nec pecuniam,nec munus, quodcumque sit, etiam qualiter cumobstante quacumque consueque offeratur, accipiant: non tudine, etiam immemorabili: exceptis tamen victualibus, quæ sibi, ac suis fruga: liter, moderatèque pro temporis tantùm necessitate, et non ultrà, erunt ministranda. Sit tamen in optione corum, qui visitantur, si maliat solvere id, quod erat ab ipsis anteà solvi, certa pecunia taxata, consuetum,an verò prædicta victualia subministrare: salvo item jure conventionum antiquarum cum monasteriis, aliisve piis locis, aut ecclesiis non parochialibus inito, quod illælocis,seu provinciis, ubi consum permaneat. In iis verò suetudo est, ut nec victualia, nec pecunia, nec quidquam aliud à Visitatoribus accipiatur, sed omnia gratis fiant; ibi id observetur.Quòd si quisquam, quod absit, aliquid ampliùs in supradictis

om

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-omnibus casibus accipere præsumpserit ; is, præter dupli restitutionem, intra mensem faciendam, aliis etiam peenis juxta constitutionem concilii generalis Lugdunensis, quæ incipit: Exigit; necnon et aliis pœnis in synodo provinciali arbitrio synodi, absque ulla spe veniæ,mulctetur. Patroni verò in iis, quæ ad Sacramentorum administrationem spectant, nullatenus se præsumant ingerere; neque visitationi ornamentorum ecclesiæ, aut bonorum stabilium, seu fabricarum proventibus immisceant; nisi quatenus id eis ex institutione, ac fundatione competat; sed Episcopi ipsi hæc faciant, et fabricarum redditus in usus ecclesiæ necessarios, et utiles, prout sibi expedire magis visum fuerit, expendi curent. Cap.IV. Pradicationis munus à quibus, et quando obeundum. Ecclesia parochialis ad audiendum verbum Dei adeunda, Nullus contradicente Episcopo pradicet. rædicationis

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ex.

munus "

quod Episcoporum præcipuum est, cupiens sancta Synodus, quò frequentiùs possit ad fidelium salutem. exerceri ; canones aliàs

super

hoc editos sub fel. record. Paulo III. aptiùs præsentium

tem

no de los casos arriba mencionados;multesele, sin esperanza alguna de perdon,ademas de la restitucion de doble cantidad que deberá hacer dentro de un mes, con otras penas, segun la constitucion del concilio general de Leon, que principia: Exigit; así como con otras de la sínodo provincial á voluntad de esta. Ni presuman los patronos entremeterse en materias pertenecientes á la administracion de los Sacramentos, ni se mezclen en la visita de los ornamentos de la iglesia, ni en las rentas de bienes raices ó fábricas, sino en quan. to esto les competa segun el establecimiento, y fundacion : por el contrario los mismos Obispos han de ser los que han de entender en ello, cuidando de que las rentas. de las fábricas se inviertan en usos necesarios y útiles á la iglesia, segun tuviesen por mas conve

· niente.

Cap. IV. Quienes, y quando ban de exercer el ministerio de la predivacion. Concurran los fieles á oir la palabra de Dios en sus parroquias. Ninguno predique contra la voluntad del Obispo. eseando el santo Concilio que se exerza con la mayor freqüencia que pueda ser, en beneficio de la salvacion de los fieles cristianos, el ministerio de la predicacion, que es el principal de los Obispos, y acomodando

D

Ss

mas

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